
Ya llevo 26 días desintoxicándome. 26 días de rehabilitación y cada día puedo ver números mágicos que son resultado de una renuncia activa.
Renuncio a comer para poder ir sumando kilos perdidos en mi tabla de descenso. No a comer realmente... a excederme.
Son 26 días y 7.4 kg perdidos. Es curioso como voy sumando de 200 gr en 200gr... y parece mentira que con cantidades tan pequeñas se hagan sumas grandes. Pero es cierto, no adelgazo directamente pasando de 103 kg a 96. Para llegar tengo que pasar por cada gramo que gané en su momento.
Y así, día tras día, sigo sumando gramos.
Resultado esperado y merecido este descenso, que no es más que una muestra nimia de lo que he de conseguir. Pero como suelen comentar los terapeutas en el grupo de gordos "si hoy he podido, y ayer pude, mañana también voy a poder". Que razonamiento más básico. Que razonamiento más válido. No es excusa el "no puedo" porque en algún momento he podido, luego tendré que buscar, si quiero zafarme de mi reto, nuevas estrategias y excusas.
De momento tengo muy claro que voy a seguir sumando. Y así, sumando y siguiendo, quiero llegar a mi peso.